Qué son los Juegos Florales
La fiesta de los juegos florales es la fiesta de la poesía, un certámen que premia composiciones poéticas, las hace escuchar y las divulga.
Nacieron en Tolosa de Llenguadoc, el siglo XIV, cuando la lengua de Oc era, por excelencia, la lengua de la poesía.
Debido a las buenas relaciones entre las tierras occitanas y Cataluña, Barcelona siguió el ejemplo de Tolosa y, ya en la Edad Media, tuvo también sus Juegos Florales, en 1393, que se celebraron hasta fines del siglo XV.
En el siglo XIX, durante la "Renaixença", los Juegos fueron reinstaurados después de tres siglos de Decadencia, durante los cuales no hubo ningún tipo de manifestación literaria. Gracias a la recuperación de la Fiesta se valoró la lengua como vehículo de cultura. Desde entonces, en Cataluña o en el exilio, no han dejado de celebrarse.
La institución que, sostenida y protegida por el Ayuntamiento de Barcelona, convoca los Juegos es el Consistorio de los Juegos Florales. A menudo, el nombre del Consistorio se ha utilizado para designar el jurado o conjunto de mantenedores que, en número de siete, son los jueces que otorgan los premios.
El Consistorio invita también a participar de la fiesta a un personaje, llamado Foráneo, no residente o no nacido en Cataluña, que tiene relación con el país, que lo conoce y lo quiere. Este invitado colabora con la fiesta explicando sus sentimientos y vivencias y los valores que ha encontrado en Cataluña.
Los premios ordinarios son:
*La Flor Natural. Es el premio de honor y cortesía a la mejor poesía que canta al amor. Según una hermosa costumbre, el ganador de este premio elige una Dama de Honor que es proclamada Reina de la Fiesta.
*LEnglantina dOr, premio a la mejor composición de carácter patriótico sobre un tema histórico, o que glose o exalte valores presentes o proyectos de futuro de la patria.
*La Viola dOr i Argent. al mejor poema que exalte la fidelidad a los valores espirituales.
Deseamos, los mantenedores (de la X@rsec) i El Secretariat /Serveis Educatius de Catalunya en general que vuestro interés y entusiasmo por la Lengua y la Literatura, por las tradiciones culturales catalanas, se traduzca en nuevas participaciones en próximos certámenes y en nuevos Juegos Florales.